La arena sílica es un compuesto de sílice y oxígeno, con una fórmula química estable de SiO₂, insoluble en agua y comúnmente encontrada como cuarzo o cristal de roca.
Clasificada como un silicato con estructura cristalina trigonal, se presenta en variedades macrocristalinas y criptocristalinas. Sus propiedades físicas y químicas, como dureza, resistencia química, y transparencia, la hacen valiosa en aplicaciones industriales.
Principalmente se utiliza como lecho filtrante para purificación de agua y en la fabricación de abrasivos. La arena sílica de alta calidad es segura, duradera y se utiliza en sistemas de tratamiento de agua potable, residuales, piscinas y procesos industriales. Además, es respetuosa con el medio ambiente y efectiva en la eliminación de impurezas.
Es esencial en la fabricación de detergentes, pinturas, hormigones, y es la materia prima para el silicio. También se emplea en la producción de refractarios de sílice y arenas de moldeo debido a su alto punto de fusión.